SESIÓN | Johan (I)
- Plaza
- 28 jun 2017
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La primera sesión de fotografía que realicé fue con Johan (Instagram). Tuvo lugar el 15 de diciembre del pasado año. Fue un día de primeras veces, puesto que también me desvirgué con el objetivo de 50 mm f/1.8.
Las primeras veces no suelen ser buenas, dicen. Y por eso me presenté a la cita con cierto respeto. No sabía si podía cumplir con las expectativas que quizá Johan se había creado sobre mí. No obstante, él fue quien me tranquilizó. Tras una pequeña conversación, llegamos al lugar donde él mismo me había recomendado: el puente de metal situado cerca del Carrefour de Campanar. Allí se realizaron las primeras fotos.
Problemas con el objetivo
Hay que tener en cuenta que este objetivo es un tanto especial. Su gran apertura nos permite conseguir retratos con un desenfoque mágico, pero esto se convierte en un arma de doble filo. Este desenfoque se consigue gracias a una profundidad de campo muy pequeña. ¿Esto qué quiere decir? Que con la apertura f/1.8, pocos puntos estarán completamente enfocados. Por ello, puede ocurrir que una misma persona tenga partes de su cuerpo enfocadas y otras que no lo estén. Hay que aprender a controlar este inconveniente cuando hacemos retratos. Al ser mi primera vez, no supe gestionarlo por completo. Por ello, algunas fotografías muestran este error.
Por ejemplo, en la siguiente fotografía, el ojo izquierdo y la nariz de Johan aparecen perfectamente enfocados. Su ojo derecho ya no tanto. Y si nos fijamos en su hombro y brazo derecho, el enfoque se ha perdido claramente.
Interactuar con el modelo
Otra cosa que necesité a la hora de hacer las fotografías fue crear un vínculo de confianza entre el modelo y el fotógrafo. En este caso, no fue muy difícil y creo que tengo que agradecérselo a él. ¡Incluso tuvo la confianza para cambiarse de ropa por completo! Conseguir este buen ambiente es imprescindible para que el sujeto se desenvuelva con soltura y tanto él como el fotógrafo saquen lo mejor de sí mismos.
Emplazamientos y ropa
Todos los fotógrafos profesionales inciden en que cualquier lugar puede ofrecer fotografías interesantes. Nosotros los fuimos eligiendo sobre la marcha. Después del puente, bajamos al cauce del río Turia y empezamos a pasear. Cuando veíamos un lugar que creíamos interesante, nos parábamos. Johan se cambiaba de ropa a lo largo de la sesión y esto ofreció muchísimas posibilidades a la hora de tener nuevas ideas.
Edición
Al tener fotografías en cuatro o cinco lugares distintos, además con distinta indumentaria, aproveché para utilizar una edición distinta para estas cuatro situaciones. Este campo también es uno en el que acabo de introducirme.
Puente. He intentado potenciar el amarillo del hierro. Creo que es un elemento muy importante dentro de la fotografía, no solo por el color, sino también porque es aquel que le da la profundidad y el dinamismo. Además, he aumentado el relieve de la fotografía para que se resaltaran más los detalles, tanto del óxido como de los rasgos de Johan. En algunas fotografías, he tenido que reducir su exposición, puesto que la luz a esas horas era muy intensa.
Ruinas. En esta ocasión he introducido una mayor exposición y contraste. Buscaba una situación más fría. Para ello he incrementado los blancos y he reducido las sombras y los negros.
Lago. La situación ofrecía un panorama más otoñal. Las hojas caídas y el reflejo del lago pedían colores cálidos. Además, las sombras del árbol sobre Johan permitían jugar con la luz. He utilizado dos máscaras. La primera, para las hojas. Y con ella he aumentado la temperatura de los colores y he oscurecido un poco la zona. La segunda, para el fondo. Con esta he conseguido bajar un poco el blanco del cielo para conseguir vislumbrar algo de azul, y he potenciado los colores amarillo y naranja de los árboles y del reflejo del agua.
Río y otros. La chaqueta aparentemente de cuero de Johan me llevó a pensar en usar tonos fríos en esta edición. Aunque el fondo de piedra hubiera sido mucho más vistoso con otras ediciones, quería probar esta. La luz, de esta forma, no es tan amarilla y ofrece otra perspectiva de los rasgos de Johan.
En definitiva. La primera vez de muchas cosas. Y por ello aprendí distintas habilidades que espero poder poner en práctica en mis próximas sesiones. ¡Gracias Johan!
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